Remedios naturales para acabar con los callos

Con los enormes esfuerzos que nuestros pies tienen que hacer a diario, es justo que les dediquemos un poco de tiempo para cuidarlos y mantenerlos sanos. Algunos de los problemas más comunes es la formación de durezas y callos. Aprende algunas maneras de cuidar en tu propia casa los pies. Remedios naturales para acabar con los callos

¿Qué son los callos?

Los callos se forman para proteger la piel. Son unos parches de piel insensible y engrosada que se forman en los puntos de presión de los pies, es decir, en los dedos, en los talones y en las zonas óseas. Existen callos dolorosos y otros que no lo son, pero en cualquier caso siempre es mejor eliminarlos.

Remedios que se pueden hacer en casa para eliminar los callos

Una de las maneras más conocidas y eficaces de eliminar en casa los callos es meterlos en un barreño con agua para que se ablanden y después utilizar una piedra pómez para eliminarlos. Este procedimiento debe repetirse una o dos veces a la semana.

Otra opción muy efectiva es poner en remojo dos rodajas de cebolla dentro de un poco de vinagre de vino durante unas cuatro horas. Transcurrido este tiempo se colocan sobre los callos y se envuelven los pies con un poco de papel film de cocina y se colocan encima unos calcetines. Este remedio debe realizarse cada noche antes de meterse en la cama para que actúe durante toda la noche. A la mañana siguiente se raspa con una piedra pómez y el callo y verás cómo desaparece muy fácilmente.

Remedios para eliminar las durezas

Las durezas son muy similares a los callos pero suelen aparecen en los dedos de los pies, siendo zonas de piel engrosadas que cuentan con un centro más duro y que son bastante dolorosas.

En este caso un buen remedio natural es utilizar aceite de ricino. También se puede colocar una rodaja de limón en la zona de la dureza atándolo con una venda y dejándolo actuar durante toda la noche. Se debe repetir durante una semana entera.

Cómo aliviar los pies cansados

Si te encuentras con los pies cansados no hay nada mejor que realizar un masaje sobre ellos con u n poco de aceite de oliva para conseguir unos resultados óptimos. Un baño de pies también es una solución muy efectiva para aliviar el cansancio, a la vez que se mejorará la circulación y se mantendrán los pies más frescos y limpios durante más tiempo. Para ello debes añadir una cuchara de hojas de romero en un barreño con agua bien caliente y dejar que reposen durante unos cinco minutos. Seguidamente llena otro barreño con agua fría y coloca ambos uno al lado del otro.

Introduce los pies durante un minuto en el agua caliente e inmediatamente después en el agua fría durante veinte segundos. Ve alternando entre los dos barreños varias veces y termina en el de agua fría. Acaba la sesión secándote muy bien los pies.