Un colutorio natural y… hecho en casa

En pocos minutos, un aliento fresco, una buena desinfección de la boca y una sonrisa limpia y sana. Un colutorio natural y... hecho en casa Enjuague bucal ¿sí o no? ¿Quién lo inventó? ¿Es bueno? ¿Es malo? O más simple aún… ¿sirve para algo? Algunos dentistas afirman a menudo que el enjuague bucal común es inútil para la higiene oral. Sin duda, su inventor, hacia fines del 1800, el alemán Lingner, ganó mucho dinero gracias a su venta. 
En la antigüedad, los griegos y los romanos ya buscaban medios  líquidos y rápidos para limpiar y desinfectar la boca y los dientes. 
Tal vez no todo el mundo sabe que los enjuagues bucales comúnmente vendidos en la actualidad pueden estar contaminando el organismo. La mayoría de ellos, al igual que muchos desinfectantes, contienen triclosan, una sustancia química antibacteriana y antiséptica, sobre la que hay opiniones contradictorias. 
Además, otros enjuagues bucales tienen en su composición parabenos, cuyo uso es controvertido porque hay quienes sostienen la necesidad de evitar su uso periódico y, según otros, afectarían, cuando son asimilados por los tejidos, hasta el sistema endocrino humano. También habría que evitar los enjuagues bucales que contengan laurilsulfato sódico  o colorantes

Los colutorios naturales, a base de aceite de árbol de té, un antibacteriano natural, sería mucho menos perjudicial para el organismo y la higiene personal.
 
¿Cómo hacer un enjuague bucal natural?

Las recetas para hacer un buen enjuague bucal natural son muchas y variadas. La base se compone de agua y sal, a la que se pueden agregar hierbas, aceites esenciales, bicarbonato. ¿Sal? Sí, ya que la sal es un desinfectante natural en sí misma; de hecho, la acción de la sal (NaCl o cloruro de sodio) es bacteriostático y elimina el agua, bloqueando las actividades vitales de los microorganismos. La adición de aceites esenciales y hierbas, purifica la boca, elimina el mal aliento y refuerza dientes y encías. veamos algunos ejemplos:

Enjuague con albahaca…

En una cacerola con agua agregar una cucharada de hojas secas de albahaca o 100 gramos de hojas frescas. Hervir durante 10 minutos, colar, añadir sal y usar este producto como enjuague bucal. Guárdelo en el refrigerador en un frasco de vidrio o de plástico para mayor durabilidad. La albahaca se puede sustituir con hojas de salvia, frescas o secas.

… con aceite de árbol de té
Si prefiere los frescos aromas de los aceites esenciales y el poder desinfectante del aceite de árbol de té, tomar una botella, llenarla con agua y añadir una cucharada de bicarbonato de sodio, 2 gotas de aceite de árbol de té, o clavo o salvia, y dos gotas de aceite esencial de menta. Agite todo para obtener un colutorio natural listo en pocos minutos.

y con vinagre de manzana!
Incluso el vinagre de manzana es un aliado valioso para un enjuague bucal natural. Poner a hervir en un cazo algunos clavos y hojas de malva durante unos minutos. Retirar del fuego y, una vez que se haya enfriado un poco, colar el líquido, agregar dos cucharadas de vinagre de manzana y una pizca de sal. Para aromatizarlo, puede añadir semillas de anís, hinojo o canela en rama.