Calma el estrés, el dolor de cabeza, pero también alivia quemaduras y cicatrices. Descubra otros usos de este versátil aceite. 
El aceite de lavanda es un producto particularmente versátil. Posee muchas propiedades y es ampliamente utilizado en las industrias cosmética y alimentaria. Pero no sólo. También es un gran remedio natural útil en la lucha contra diversos problemas: desde picaduras de insectos, dolores musculares, problemas asociados con un amplio espectro de hongos patógenos, hasta su utilización en la aromaterapia.
Muchos aromaterapeutas, por ejemplo, están de acuerdo en que el aceite de lavanda es uno de los aceites más versátiles disponibles.
Veamos algunos ejemplos de posibles usos del aceite de lavanda:
1. Para aliviar dolores de cabeza
El primero uso interesante que podemos hacer del aceite de lavanda es como una solución para aliviar los dolores de cabeza causados por el exceso de tensión. Para ello, basta con aplicar 3-5 gotas de aceite esencial de lavanda en un paño caliente (o frío), previamente humedecido con un poco de agua. Apoyarlo en la frente mientras se está acostado y mantenerlo durante 10-20 minutos.
Si no puede ponerse cómodo, tal vez porque estás en la oficina, puede aplicar unas gotas en las sienes y realizar movimientos circulares. Encontrará un alivio inmediato.
2. Para favorecer el sueño
Incorporar el aceite de lavanda en su rutina diaria antes de ir a dormir, le ayudará a dormirse más rápido, ya que parece que este producto ayuda a las personas que sufren de trastornos del sueño. Puede disfrutar de los beneficios relajantes del aceite de lavanda de varias maneras: mediante el uso de un difusor, añadido a la crema de noche, masajeando sus sienes o mediante la colocación de 1 o 2 gotas en la almohada. La tisana de lavanda es también una de las más utilizadas para las personas que sufren de insomnio.
3. Aliviar el dolor de pequeñas quemaduras
El aceite de lavanda se puede utilizar para dar alivio en caso de quemaduras menores que no impliquen laceraciones de la piel. Antes de usarlo, sin embargo, es necesario enfriar la zona con agua corriente durante al menos 5 minutos (recuerde nunca aplicar hielo!). Sólo entonces, aplicar 2 o 3 gotas en la parte afectada, para reducir el dolor y acelerar el proceso de curación. Si usted tiene la piel sensible, use aceite de lavanda diluido y probando una dosis muy pequeña para ver los efectos.
4. Contra la ansiedad y el estrés
Como mencionamos antes, la lavanda es una de las plantas más utilizadas para calmar los nervios y las emociones fuertes. Es como un sedante natural. Agregar un par de gotas a un vaporizador y utilizar para masaje o como perfume. Le ayudará a relajarse.
5. Para el tratamiento de acné
Si usted sufre de este problema, el aceite de lavanda podría ser la solución. Agregar 1 o 2 gotas a la crema facial favorita. La lavanda inhibe el crecimiento de bacterias y ayuda al organismo a equilibrar la secreción de sebo.
6. Como desinfectante de heridas leves
La lavanda tiene propiedades antibacterianas y analgésicas. Ayuda al proceso de curación y, según algunos, también serviría para detener el sangrado menor. Basta con aplicar sólo unas pocas gotas de aceite de lavanda en el corte o herida. Si tiene la piel sensible, recuerde que siempre es mejor usarlo diluido en agua.
7. Para la piel seca y agrietada
El aceite de lavanda hace maravillas en la piel seca y agrietada. Úselo de forma tópica sobre la zona afectada o añada unas gotas a su crema corporal favorita. Incluso se puede añadir al bálsamo para los labios.
8. Alivia los síntomas de la cinetosis o náuseas
Ponga una gota de aceite esencial de lavanda detrás de las orejas, o simplemente inhálelo de un pañuelo, para encontrar alivio. No se recomienda durante el embarazo.
Como se ve, el aceite de lavanda es uno de los aceites esenciales más versátiles que podemos encontrar. Seguramente sus beneficios no se limitan sólo a estos 8 usos. Es muy bueno para tener y usar en cualquier eventualidad! Lo importante siempre es asegurarse de su origen y su composición.
