Un problema que nos avergüenza pero que tiene solución. Cuáles son sus síntomas, su diagnóstico y los remedios naturales para combatirlo. 
La halitosis podría parecer una dolencia insignificante, pero en realidad, es una condición que influye mucho sobre la vida y las relaciones interpersonales de cada uno de nosotros.
La principal causa del mal aliento es una mala higiene bucal, que provoca que las bacterias anaerobias que viven en la boca aniden en los espacios interdentales. Se producen entonces compuestos volátiles y sulfurosos que provocan el mal aliento y dan lugar a la «halitosis transitoria«, un fenómeno fisiológico perfectamente tratable a través de una buena higiene oral. La inflamación de la boca (estomatitis, gingivitis, amigdalitis), también puede dar lugar al mal aliento, pero son causas menos comunes.
Esencialmente, además de la halitosis transitoria , se puede hablar de un segundo tipo de halitosis: la halitosis persistente patológica causada por diversas enfermedades de la cavidad oral, que pueden dar lugar a una enfermedad sistémica grave.
Síntomas de la halitosis
El mal aliento puede ocurrir en ciertos momentos del día, como al despertar. Es importante tener en cuenta la frecuencia con que aparece la halitosis, a fin de entender si el problema se circunscribe a casos aislados o se prolonga en el tiempo. El mal aliento puede estar acompañado por dolor en las encías o sangrado (en ese caso pueden existir caries o enfermedad de las encías).
También hay una halitosos de naturaleza aparentemente psicológica: el sujeto está convencido de tener mal aliento cuando en realidad no es así. El desorden en este caso está relacionado con la confianza y la autoestima.
Diagnóstico
El mal aliento requiere un diagnóstico preciso en virtud de las múltiples causas que pueden desencadenarlo, y que van desde la ingestión trivial de determinados alimentos, como ajo y cebollas,hasta la posibilidad de enfermedades crónicas.
En el primer caso se trata de un trastorno que se produce sólo en determinados momentos del día. Es esencialmente un fenómeno fisiológico que se controla perfectamente a una correcta higiene oral, a través de la cual se eliminen las bacterias anaerobias de la boca, principales responsables, junto con la enfermedad de las encías, el estrés, el cigarrillo y la boca seca.
La halitosis patológica persistente, que involucra el 10% restante de los casos, en oposición a la primera, no desaparece incluso después de una buena higiene bucal, ya que es causada por enfermedades sistémicas graves tales como la diabetes mellitus, enfermedad hepática aguda y la insuficiencia renal crónica.
Que alimentación debemos seguir en caso de halitosis
Después de cada comida, la higiene bucal debe incluir un correcto cepillado que abarque el arco dental, las encías y la parte posterior de la lengua.
Los alimentos que son más pesados de digerir son todos los alimentos con aditivos o transformados industrialmente: azúcar blanco, dulces, snacks, bebidas azucaradas, harinas refinadas, alimentos de origen animal en exceso, tales como la carne roja y embutidos y productos lácteos en exceso, tales como el queso y mozzarella.
Si el caso es un exceso de ácido estomacal, durante los primeros días que se presente el problema, se debe evitar incluso la fruta, que podría fermentar y por lo tanto aumentar el trastorno.
Una alimentación acidificante puede ser abordado equilibrada con alimentos alcalinizantes que contengan vitaminas y minerales, como las frutas y verduras de temporada.
Reducir y, cuando sea posible, evitar: leche y productos lácteos, un alto consumo de carne (especialmente rojas), y alimentos refinados.
Se deben preferir cereales integrales, verduras, frutas no muy ácidas, y proteínas fáciles de digerir como huevos y pescado fresco.
Remedios naturales y plantas medicinales para la halitosis
En el caso de la halitosis transitoria, la krameria ha demostrado interesantes propiedades antibacterianas y antifúngicas, lo que justifica su uso en forma de tintura madre o como ingriedente en enjuagues bucales y dentífricos, para el tratamiento de la gingivitis y laestomatitis (una inflamación de la mucosa de la boca).
Puede ayudar también beber a pequeños sorbos agua caliente, hervida durante 10 minutos con jengibre fresco: este es un remedio que ayuda a la digestión y combate la acumulación de toxinas y la fermentación bacteriana.
Aromaterapia en caso de halitosis
Los aceites esenciales utilizados en aromaterapia para combatir la halitosis explotan la acción antibacteriana de estas especies, debido a su capacidad para neutralizar los microorganismos que causan los malos olores y la formación de placa. También puede ponerse 1 gota en pasta de dientes para incrementar su poder antiséptico y desodorante o para preparar enjuagues bucales. Entre los más recomendables están:
Aceite esencial de menta: es refrescante y desinfectante de la boca, muy útil para desodorizar el aliento: Contra la halitosis, se pueden usar 5-7 gotas en medio vaso de agua para enjuagar y hacer gárgaras.
Aceite esencial de mirra: es antiséptico y antibacteriano; se usa para resolver problemas relacionados con la boca, tales como gingivitis, estomatitis o llagas. Para hacer una loción, colocar 5 gotas de mirra en un vaso de agua tibia y realizar enjuagues, por lo menos dos veces al día, contra las ulceraciones e infecciones de la boca y también el mal aliento.
Aceite esencial de bergamota: es antiséptico y desinfectante para casos de abscesos y otras infecciones e irritaciones en la boca. En enjuagues bucales y para hacer gárgaras contra la halitosis se recomienda poner 5 gotas de bergamota en un vaso de agua tibia y hacer enjuagues prolongados, por lo menos dos veces al día.
Aceite esencial de salvia: tiene un efecto purificador, tomando 2 gotas en una cdta. de miel, tiene propiedades desintoxicantes del hígado y los riñones, también es útil para el tratamiento de la halitosis de naturaleza continua, debido al mal funcionamiento de estos dos órganos excretores. En un vaso de agua tibia poner 5 gotas de salvia. Realizar enjuagues prolongados, por lo menos dos veces al día, para atacar úlceras bucales, sangrado de encías, estomatitis y laringitis.
Ejercicios
Contra la halitosis, la mejor defensa es sel cepillado y el uso del hilo dental. Cepillar esmeradamente cada diente en sus caras internas y externas, sin olvidar higienizar tambipen la lengua, para eliminar las bacterias y refrescar el aliento. Para eliminar la placa entre los dientes, el uso de hilo dental es indispensable.
En caso de halitosis es muy importante beber mucha agua durante todo el día, la hidratación es fundamental, sobre todo si se practica mucho deporte.
Véase también:
Halitosis: 10 remedios naturales contra el mal aliento
