Cómo secar las rosas de su jardín

Y cuando es el mejor momento para podar los rosales… Cómo secar las rosas de su jardín Secar las rosas que tiene en su jardín es una fácil manera de conservar su perfume todo el año. Cuando las rosas de sus macetas o jardín se encuentran en su momento de máxima floración es, sin duda, el mejor momento para tener los más hermosos ramos y arreglos para su casa. Y si quiere conservar sus rosas todo el año, sólo tiene que secarlas!

Secar las rosas es en realidad muy simple y le permitirá tener un bouquet refinado para utilizar en la  decoración de su casa o para crear un variado popurrí para perfumar cuaquier ambiente.

El secreto para tener flores secas en perfecto estado es acelerar, tanto como sea posible, el proceso de deshidratación. Lo primero es recoger las rosas, cortándoles el tallo con un corte oblicuo. La mejor manera es secar las rosas una por una, pero si no tiene mucho espacio, puede reaizar el proceso en ramilletes de hasta 4 o 5 rosas.

Antes de ponerlas a secar, retire las hojas y los pétalos feos: luego cuelgue las rosas al revés. El lugar ideal es un lugar cálido y seco: mantenerlas alejados del sol que las arruinará sin permitir que se sequen.}

El mejor lugar es un ático o en el garaje si no es húmedo: no se recomienda el baño ni en la cocina donde los vapores de la comida y duchas dañan el proceso de secado.
Una vez que colgadas las flores, tardan alrededor de un par de semanas para que están completamente secas: en este punto se puede separar y usarlos para preparar arreglos florales.
Puede usar los pétalos de las rosas para crear en casa un fragante agua de rosas.

¿Cuándo es el mejor momento para podar las rosas?

Las rosas, para que florezcan mejor, se deben podar: el mejor momento para podar la planta sin dañarla es entre mediados de enero y mediados de marzo (en el hemisferio norte). Sin embargo, si la planta es de rosas trepadoras se deben podar a finales del verano, después de que la planta ya nos dado todas sus flores.

Si se trata de una planta joven recien plantada, hay que esperar hasta la primavera. Si, en cambio, es una planta adulta, que tiene por lo menos un año, se deben podar las ramas más débiles para robustecer toda la planta y producir más floración.

Estas ramas deben ser completamente podadas, cortándolas desde la base. En el caso de las ramas más robustas cortar sólo pequeños trozos, tratando de crear espacios interiores para que la planta esté ventilado y, de esta manera, se incremente la floración en verano.

Preste atención finalmente a los retoños, es decir, las ramas que salen directamente de la raíz del rosal: éstos se deben cortar sin ninguna piedad!

Por supuesto, eliminar todas las ramas muertas y las que estén irremediablemente dañadas: mantener solo las yemas que asoman hacia el exterior del rosal, a fin de dar a su planta una forma armónica. Ármese de paciencia y en poco tiempo podrás ver sus rosas florecer más bellas que nunca!